Skip to nav Skip to content

El melanoma acral lentiginoso es un tipo de cáncer de piel relativamente infrecuente que aparece por lo general en las palmas de las manos, las plantas de los pies o debajo de las uñas de los dedos de las manos o de los pies (con más frecuencia, en el pulgar o en el dedo gordo). Las alteraciones cancerosas se originan en los melanocitos (las células que producen el pigmento que le da color a la piel). Su nombre se deriva del griego acral, que significa «extremidad» y del latín lentigo, que significa «peca», y se refiere a que las manchas del melanoma a menudo son más oscuras que la piel que las rodea.

doctor examines the bottom of a foot for melanoma

Aunque el melanoma acral lentiginoso es el tipo más frecuente de melanoma en las personas de piel oscura, se presenta en personas de todo tipo de piel. Después de crecer en la capa más externa de la piel o bajo el lecho ungueal, el cáncer puede extenderse y volverse invasivo si no se trata. Los tumores elevados tienden a ser más invasivos, pero incluso si una lesión cancerosa parece ser plana en la superficie, puede extenderse a capas profundas de la piel y a los tejidos subyacentes.

Las causas y los factores de riesgo del melanoma acral lentiginoso

Muchos expertos creen que algunas personas tienen predisposición genética al melanoma acral lentiginoso. Sin embargo, los investigadores aún no saben exactamente cuáles son las causas de la enfermedad ni cómo prevenirla.

A diferencia del carcinoma basocelular, el carcinoma espinocelular y otros tipos de cáncer de piel, el melanoma acral lentiginoso no se ha vinculado de manera concluyente con la exposición a la luz del sol ni a otros tipos de radiación ultravioleta. En efecto, es difícil presentar una quemadura de sol en las palmas de las manos o las plantas de los pies, o broncearse estas partes del cuerpo. El cáncer no muestra las alteraciones genéticas que normalmente se deben al daño causado por la radiación ultravioleta. De hecho, su composición genética es única. Aunque cerca de la mitad de los melanomas cutáneos tienen una mutación en BRAF, esta mutación aparece en menos del 20 % de los melanomas acrales lentiginosos.

Los signos y síntomas del melanoma acral lentiginoso

Flat uniformly pigmented macule, commonly occurring on the plantar foot
Photo from National Cancer Institute

Los signos de alerta del melanoma acral lentiginoso son:

  • Una franja oscura nueva en una uña de una mano o de un pie que no es el resultado inmediato de un traumatismo directo (como golpearse con un martillo), en particular si es lateral o crece más rápido que la uña misma
  • Una franja oscura y delgada que va desde la cutícula hasta el borde de la uña, y que la ha agrietado o quebrado
  • Alteraciones del tamaño, la forma, el color o la textura de un lunar que ya existía en una mano o un pie, por ejemplo, una pigmentación o color oscuro que se extiende desde debajo de la uña hasta la piel normal que la rodea
  • Una lesión nueva en una mano o en un pie que es asimétrica, tiene color o bordes irregulares, tiene más de 6 milímetros de diámetro o presenta cambios de tamaño, forma o color
  • Una lesión que parece un moretón o una mancha
  • Una placa elevada y engrosada en la piel de la palma de la mano o de la planta del pie

La mayoría de las lesiones del melanoma acral lentiginoso son negras o de color pardo oscuro, pero algunas son de colores claros, con tonos de rojo, anaranjado, rosado, gris o pardo claro, mientras que otras son completamente incoloras. A medida que la lesión crece, podría volverse más irregular en tamaño o forma. En algunos casos, una lesión de melanoma en la planta del pie puede causar dolor al caminar y confundirse con una verruga plantar.

El diagnóstico del melanoma acral lentiginoso

Todos los tipos de melanoma, incluido el melanoma acral lentiginoso, requieren atención médica lo más pronto posible. El diagnóstico temprano es esencial para lograr un desenlace clínico y una calidad de vida tan óptimos como sea posible. Por lo tanto, el examen periódico de la piel y de las uñas en busca de cambios poco habituales puede salvar vidas. Es de particular importancia revisar las palmas de las manos y las plantas de los pies, que algunas personas pasan por alto al examinarse la piel.

Para llegar a un diagnóstico concluyente de melanoma acral lentiginoso se requiere una biopsia (en lo posible, lo ideal es una biopsia por escisión de márgenes delgados). Sin embargo, en la mayoría de los casos una biopsia parcial es la forma más rápida y fácil de establecer el diagnóstico. Durante esta intervención, una parte o la totalidad de la lesión sospechosa se extirpa junto con una cantidad pequeña de tejido sano adyacente. Los tejidos se envían luego al laboratorio, donde un dermatopatólogo los examina al microscopio para ver si detecta células cancerosas.

El tratamiento del melanoma acral lentiginoso

Cuando el melanoma acral lentiginoso se diagnostica en sus estadios iniciales, se puede tratar con eficacia y a menudo se puede curar. El tratamiento puede variar según la extensión y profundidad del cáncer. La estrategia más frecuente consiste en una operación para extirpar la lesión cancerosa junto con un margen delgado de piel sana adyacente. Esta intervención puede realizarse dentro del proceso diagnóstico. Puesto que el melanoma acral lentiginoso puede presentarse en zonas delicadas y de difícil acceso del cuerpo, es importante ponerse en manos de un especialista con mucha experiencia que tome medidas para conservar el aspecto de la piel y evitar que el cáncer vuelva a presentarse.

Si el melanoma acral lentiginoso se ha extendido a otros tejidos y órganos, se puede considerar una asociación de tratamientos, entre ellos los siguientes:

Qué se ofrece en Moffitt Cancer Center

Debido a que el melanoma acral lentiginoso es tan infrecuente, es uno de los tipos de cáncer que se han investigado menos. Por lo tanto, es esencial buscar tratamiento en un centro oncológico en el que se atienda a un gran número de pacientes y que vaya a la vanguardia en cuanto a la investigación. Moffitt Cancer Center se enorgullece de haber establecido uno de los mejores programas de melanoma de Florida, y un programa de investigación activa sobre el melanoma acral lentiginoso. Muchos pacientes le confían su atención médica al Programa de Oncología Cutánea, dirigido por médicos investigadores de primera calidad. Juntos, estos profesionales médicos tan especializados van a la cabeza en la investigación de nuevas estrategias preventivas y conciben nuevos tratamientos para todos los tipos de melanoma.

Si ya le han diagnosticado un melanoma acral lentiginoso u otro tipo de cáncer de piel y quiere pedir una cita en el Consultorio de Oncología Cutánea, puede llamar al (813) 745-3980 o enviar por Internet el formulario de registro de pacientes nuevos. Además, si ya le han diagnosticado melanoma y desea una segunda opinión, revisaremos con mucho gusto sus análisis clínicos, su biopsia y sus pruebas de imagen. En su calidad de paciente nuevo, puede sentirse confiado de que le comunicaremos cuanto antes con un experto en cáncer, y de que le responderemos lo antes posible, independientemente del punto en que se encuentre en el tratamiento del cáncer. No necesita una remisión para venir a Moffitt.