La transformación de la experiencia para los pacientes quirúrgicos ingresados
Para que los pacientes sanen y se recuperen de una intervención quirúrgica, es necesario que el entorno los capacite y los estimule para ello. Los momentos que siguen a una intervención quirúrgica en la habitación del paciente pueden ser tan importantes como la intervención en sí. Cuando Moffitt Cancer Center emprendió la construcción de un nuevo hospital e imaginó una nueva experiencia para el paciente quirúrgico ingresado, invitamos a los mejores expertos para que nos ayudaran: nuestros pacientes y sus familias.
Junto con arquitectos y en varias sesiones de diseño, los pacientes y familiares asesores nos brindaron aportes sobre sus propias experiencias como pacientes quirúrgicos. Los asesores hicieron hincapié en que uno de los ámbitos donde Moffitt podía mejorar era en la tecnología de las habitaciones del hospital. Basándonos en estas opiniones, las habitaciones del Hospital de Moffitt en McKinley no tendrán comparación con las de ningún otro hospital.
Estarán equipadas con tecnología de asistente virtual, almohadas con parlantes integrados y controles por voz. Asimismo, cada habitación estará equipada con grandes pantallas de televisión en las que se ofrecerán opciones de entretenimiento y recursos educativos. Las pantallas digitales, a su vez, reemplazarán los pizarrones blancos típicos que se ven en todos los sistemas hospitalarios. La información en las pizarras digitales se actualizará en tiempo real según la historia clínica del paciente, lo que permite que el paciente y sus familiares vean fácilmente las restricciones alimentarias, las alergias, las inquietudes médicas y más.
Otra inquietud que trajeron a colación los pacientes y familiares asesores tenía que ver con los profesionales de la salud que entran a la habitación. Los pacientes de Moffitt se atienden con una gran variedad de profesionales de varias disciplinas, y puede ser confuso llevar la cuenta de quién es quién, especialmente mientras se recuperan de una intervención quirúrgica.
En la pantalla digital también figurará el nombre del personal de Moffitt que entra en la habitación, para que los pacientes y sus familiares sepan en todo momento el nombre de los profesionales que les tratan. En la parte exterior de la puerta de cada habitación se instalarán carteles digitales que se actualizarán en tiempo real con las medidas de precaución pertinentes.
Aunque la tecnología desempeña una función importante para los pacientes, sabemos que los cuidadores también son fundamentales en su recuperación. Para que el espacio sea más cómodo para los cuidadores, hemos aumentado el tamaño de las camas del acompañante en las habitaciones. Para que los cuidadores se recarguen, en el nuevo hospital también se ofrecen duchas para familiares, cuartos de lavandería, un salón espiritual, un centro de recursos y salas de espera amplias con rincones privados donde retirarse en los momentos de descanso. Con estas características mejoradas, albergamos la esperanza de que el Hospital de Moffitt en McKinley brinde un entorno sanador donde los pacientes y sus familias se sientan tan cómodos como en su casa.